La serie de Ashtanga es exigente. Claro que siempre hasta donde nuestros propios límites lo permiten. Pero, para mi sorpresa, el hecho de poner más de energía en la práctica, no sólo me hizo muy bien al cuerpo y a la mente, si no que me ha llenado de renovada y muchas más cantidad de energía!
Me siento mucho mejor, con más fuerza y elongación y muy a gusto con este estilo de Yoga. El día que más cansada estoy, con más ganas voy a mi práctica porque sé lo bien que me diento después.
Al poco tiempo me llamó Eliana, que quería tomar clases de Yoga con un grupo de amigas. Le conté de mi práctica de Ashtanga Yoga. A ella le habían hablado del estilo y quería practicarlo. Iniciamos las clases con el grupo de amigas a domicilio. Ellas están muy contentas y yo mucho más con el lindo grupo humano y de amigas que conforman! (ver fotos).
No lo duden, empiece su práctica Yoga!